Al fin parece que el frío se instala en estas tierras; no es que me guste, pero hay que reconocer que ya iba siendo hora. Y para que no olvidemos los buenos ratos pasados en los días de calor y vacaciones, traigo aquí un amplio recorrido por las imágenes que tantos amigos han tenido a bien mandarme, demostrándome que se acuerdan de mi y que les he contagiado un poquito mi afición a andar con la nariz levantada, mirando a los ojos a las fachadas que vamos encontrando.
El primero,
Eusebio, mi colega bibliotecario, también colega en las aficiones blogueras y de facebook, que anduvo por tierras portuguesas:
Eusebio, Miranda do Douro, Portugal
Cecilia, no sólo mira el mundo desde su balcón, sino que sabe mirar a ventanas y balcones preciosos cuando anda por esos mundos:
Cecilia, Praga, República Checa
Cecilia, Karlovy Vary, República Checa
Cecilia, Karlovy Vary, República Checa
Cecilia, Karlovy Vary, República Checa
Daniel cruzó el estrecho y anduvo por las tierras de la Reina Dido, hoy Túnez, donde saben combinar con este acierto los blancos y azules que evocan el mar:
Daniel, Sidi Bous Said, Túnez
Daniel, Sidi Bous Said, Túnez
Daniel, Sidi Bous Said, Túnez
María, viajera infatigable donde las haya, avanzó más por el Mediterráneo y llegó hasta Grecia:
Maria, Kalikratia, Grecia
María, Ouranopolis, Grecia
María, San Esteban, Grecia
Las ventanas siguientes tienen para mi un valor especial. La autora de las fotos es ni más ni menos que una niña de 9 años, que ya muestra una habilidad especial para enfocar su cámara: les presento a mi sobrina Sofía, o más bien, algunas muestras de su paso por Barcelona:
Sofía, Barcelona
Sofía, Barcelona
Sofía, Barcelona, Sagrada Familia
Sofía, Barcelona
Mi amigo Santiago tan pronto está en su tierra natal, Ayamonte, como se da una vueltecita por tierras sorianas. Aunque este verano ha estado algo pachucho, se ha acordado de mi:
Santiago, Ayamonte, Huelva
Santiago, Palacio de Gomara, Soria
Otro colega bloguero , Miroslav Panciutti, trae esta visión minimalista de México:
Miroslav, Aguascalientes, México
Julio, cuya cámara ha ganado más de un premio, sorprende el poniente en esta fachada de Segovia:
Julio, Madriguera, Segovia
Heinrich, siempre austero, sabe ver el encanto de las cosas antiguas. Ya no servirá como ventana, pero conserva cierta belleza
Heinrich, Valvieja de Ayllón
Heinrich, Zumárraga
Carmen estuvo en Sevilla, (no, no es la que presenta "Cine de Barrio" ¡por Dios!)
Y supo traerse la gracia de una maceta encarcelada,
...un balcón que en realidad son cuatro...
...un ventanuco tan pequeño que ni llega a tragaluz...
...vaya contraste con este óvalo de merengue y melocotón...
...una reja, como es debido, con celosía para que los paseantes no fisguen el interior...
...y esta otra, vecina de Santa Teresa, que seguro que encuentra mucho más suave este clima que el de su Ávila...
...elegancia y sobriedad...
...y la palma del Domingo de Ramos engalanando los balcones de nata y fresa...
...un toque de amarillo en este chaflán, para guardar la luz del sol sevillano...
...y un alarde barroco por que si, porque es Sevilla, y con eso está dicho todo!
Vaya contraste con la sencillez rural de Roda de Isábena, o Lascuarres, en Huesca
Carmen, Roda de Isábena, Huesca
Carmen, Lascuarres, Huesca
Ricardo, Lascuarres, Huesca
El jardín parece más florido, contemplado desde la penumbra amable de la cocina, en Villajuán de Arosa, Pontevedra
Ricardo, Villajuan, Pontevedra
Y me despido con otra sobrina: Ana anduvo por los pueblos negros de la Sierra Norte de Guadalajara, un tesoro de arquitectura tradicional:
Ana, Pueblos negros de Guadalajara
Espero que os hayan gustado, porque estoy preparando un especial de ventanas portuguesas.
Estuve en Oporto y me entusiasmó. Ya vereis.
