miércoles, 5 de diciembre de 2007

Mas de Madrid

El otro día me propuse (y les propuse) sistematizar un poco estos paseos madrileños, así que hoy, para no cansarnos mucho, nos vamos a dedicar a un solo barrio, el de Salamanca, y ya verán cuánto va a dar de si.
Para empezar. un edificio emblemático, que merecería un monográfico para él solo, casi: el ABC de Serrano, reconvertido en centro comercial.




La próxima vez que pasen cerca de la Puerta de Alcalá, busquen esta ventana. Absurda, nadie se puede asomar a ella, sin utilidad aparente.
Cuánto le gustaría a Cyrano de Bergerac: "C'est bien plus beau lorsque c'est inutile"


Volvamos por la Calle de Velázquez


Una casa normal y corriente, pero ligada a la historia familiar. En ella vivieron los abuelos de mi santo esposo. No lo van a creer, pero debajo había una lechería con vacas, estabuladas dentro de Madrid. Y cuando eran buenas las llevaban de paseo al Retiro.


Calle de Lagasca, en primavera






Un chaflán con capiruchete.



Son balcones sencillos, pero tienen su toque de merengue en las molduras



El mirador no tiene mucha gracia, pero sirve de espejo a la casa de enfrente...



...con sus cenefas

Esta casa merece un poco mas de atención. Este año se han cumplido los 100 desde su construcción por el arquitecto José Espelius Anduaga, y es uno de los edificios mas notables de la calle Goya. Ocupa el nº 32, y pinchando en la foto veréis mas información sobre el inmueble.

Pero yo hice las fotos sin saber que era tan histórico, simplemente porque me llamó la atención la decoración abigarrada y fantástica. Desde la torrecilla que corona el chaflán...



... a las cabezas de elefantes engalanados que sostienen las balaustradas, los leones que abren sus fauces sobre los balcones...


... o los atlantes que enmarcan los ventanales.



Un alarde decorativo que contrasta con la sencillez del tiesto de gitanillas en estas humildes ventanas que quieren ser balcones pero se quedan a medio camino




Esas terrazas espléndidas, envidiables, de las casas de principios del XX, que son un remanso de frescor en las noches de verano, la mejor habitación de la casa




Los tonos blancos y cremas dan un toque de elegancia afrancesada a algunas casas




Calle Lista (me da igual que el nombre oficial sea Ortega y Gasset, para mi siempre ha sido y será Lista)


Balcones de toda la vida en Conde de Aranda, con su plaquita de "Asegurada de incendios"


Y otros, mucho mas clásicos, coronados por frontones triangulares, en Claudio Coello
Estos se adornan con la explosión primaveral del árbol del amor

Una fachada esgrafiada, al estilo segoviano, en Conde de Peñalver (otra que tal, siempre fué Torrijos, de toda la vida)
Y los miradores, que parecen todos iguales, pero cuántas variantes admiten. Los diáfanos que no esconden nada


Los recatados, que se cierran totalmente al espectador

Los que levantan una esquinita del visillo para otear la calle
Los que tienen la amplitud de un pequeño saloncito

Y los que se adornan con columnas



Y para despedirnos un salto desde un extremo del barrio hasta el otro: estas ventanitas están en la Fuente del Berro, ya al otro lado de Doctor Esquerdo



Y este ojo de buey en Alfonso XII, frente al Retiro.

Espero no haberos cansado en este paseo, porque aún queda mucho por ver.
¡Hasta la próxima, buen puente de la Consti!

8 comentarios:

Apolonio-de-Rodas dijo...

No se porqué, pero me pasaria horas viendo las fotos de ventanas, tendria que hacermelo mirar ¿no crees?
Un beso

Raquel Barbieri dijo...

Querida Cigarra,

Al igual que Apolonio, yo me pasaría mis buenas horas viendo las ventanas... qué belleza, qué magia, cada cual con su toque. Esas esquinitas con espacios vitrados... me dan ganas de tener un lugar así desde donde escribir y mirar hacia la calle.
Me enamoré de algunas de las ventanas, y me ha gustado mucho la que fuera casa de los abuelos de tu esposo (el cigarro).

Madrid me parece una ciudad llena de lugares para descubrir... qué bien ornamentada... un día iré.

Gracias por este posteo,

un abrazo desde Buenos Aires entrando en el veranito :)

Franziska dijo...

Cuando llegues a Madrid, chulona mía, habrás de irte a pasear por la Puerta de Alcalá y mirar con atención a las ventanas, balcones y miradores, o buscarte a "Cigarra" para que te asesore de lo que merecee la pena mirar en la calle de Lagasca o en el 32 de Goya y qué sé yo pues son tantos que ya no habrá quebranto en seguir caminando.
Te felicito, bromillas aparte. Ha sido un paseo genial. Y cuidado que habré pasado por los sitios que indicas sin verlo: es increíble ¿en qué estaré pensando?

Maria dijo...

No te puedes imaginar cuanto he disfrutado de este paseo tuyo. Y mira que conozco la zona, paso por ella y miro bien los edificios para no perderme nada. Aun así hay cosas que no conocía, como la ventana inutil. Por más vueltas que le doy no logro averiguar donde estará. Menudo "piège". Iré lo antes posible a darme una vuelta por allí, solo para descubrirla. ¿crees que lo conseguiré?

Cigarra dijo...

¿Y para qué te lo vas a hacer mirar, Apolonio? Mejor mira por las ventanas, que para eso están.

Raquel, te esperamos en Madrid, y te aseguro que tiene tantas cosas por descubrir, que yo aún sigo descubriendo, después de taitantos años.¡Qué envidia, el veranito, con el catarro que tengo!

Franziska, tengo muchas mas que iré poniendo poco a poco. Verás qué bonito Argüelles.

Maria, mira bien, mira bien, que no te quiero dar pistas. Te juro que está en la mismísima Plaza de la Independencia, y solo hay tres posibilidades, porque uno de los cuatro lados está ocupado por el Retiro.

Maria dijo...

Ok Cigarra, a ciegas voy. Eso si si ves a una vieja loca dando saltos en plena puerta de Alcalá sabrás que la encontre... je je

EMNM dijo...

Muy buen post, compartimos la misma afición por las vantanas y las fachadas.

Te paso este enlace de ventanas y fachadas de mi blog, suelo poner una foto de este tipo al mes.
http://esmadridnomadriz.blogspot.com/2008/01/fachadas-de-madrid.html

Saludos

CarmenS dijo...

Preciosas tus fotos de ventanas y balcones. Hay mucho arte y mucha belleza en las fachadas de los edificios de Madrid, pero no los miramos con frecuencia porque tenemos que poner los ojos en el suelo. Yo he ido paseando por una calle con la vista en los pisos altos y he estado a punto de pegarme un tropezón con un adoquín suelto o un bolardo. Tú te has parado, has hecho una foto y has admirado. Interesante paseo que ha dado tan hermoso rsultado.