lunes, 22 de marzo de 2010

Primavera, al fin.





Palacio, buen amigo,
¿está la primavera
vistiendo ya las ramas de los chopos
del río y los caminos? En la estepa
del alto Duero, Primavera tarda,
¡pero es tan bella y dulce cuando llega!...



¿Tienen los viejos olmos
algunas hojas nuevas?




Aún las acacias estarán desnudas
y nevados los montes de las sierras.




¡Oh mole del Moncayo blanca y rosa,

allá, en el cielo de Aragón, tan bella!



¿Hay zarzas florecidas

entre las grises peñas,

y blancas margaritas

entre la fina hierba?


Por esos campanarios

ya habrán ido llegando las cigüeñas.




Habrá trigales verdes,

y mulas pardas en las sementeras,

y labriegos que siembran los tardíos

con las lluvias de abril. Ya las abejas

libarán del tomillo y el romero.




¿Hay ciruelos en flor?

¿Quedan violetas?




Furtivos cazadores, los reclamos

de la perdiz bajo las capas luengas,

no faltarán. Palacio, buen amigo,

¿tienen ya ruiseñores las riberas?




Con los primeros lirios

y las primeras rosas de las huertas,

en una tarde azul, sube al Espino,

al alto Espino donde está su tierra...



Antonio Machado

A Jose María Palacio


2 comentarios:

Anónimo dijo...

¡Al fin llegó!. Lo que es maravilloso es que los almendros no se olviden de florecer... ni mi "jabonero de China" se olvide de sacar sus brotecitos rojos... ¡Qué lista, la naturaleza!..

Besos,
Carmen

Cigarra dijo...

Ay, si, Carmen, y mi gingko está ya abriendo sus brotecitos. Estoy emocionada. Ya pondré alguna foto, y de las primeras amapolas, que este año las he visto ¡en Siria! Allí van más adelantadas, que hace más calorcito.